El desmaquillado es tu rutina de belleza nocturna y, como toda rutina bien establecida, implica varios pasos esenciales para todo el rostro, sin olvidar el cuello y los párpados. Un momento ideal para cuidar de ti misma y de tu piel.
1. Me desmaquillo con un desmaquillante adaptado a mi tipo de piel
2. Retiro el exceso de productos con un paño humedecido con agua termal
3. Aplico mi tratamiento, sérum o crema hidratante sobre mi piel recién limpia
¿Por qué es importante desmaquillarse?
Cada noche hay que desmaquillarse, es un paso esencial en la rutina de belleza. \nEn efecto, el desmaquillado es esencial después de un día en el que el maquillaje, la contaminación y el polvo se han acumulado en la superficie de la piel. Si te saltas este paso, corres el riesgo de que estas impurezas se conviertan en problemas cutáneos: rojeces, manchas, irritación o aparición de arrugas en la zona del ojo, que es muy sensible. Por último, el desmaquillado permite que la piel se regenere. Es durante la noche cuando se repara y se renueva. \n¿Y por la mañana? Este «trabajo» nocturno suele dejar una ligera película grasa en el rostro. Antes de empezar tu rutina de hidratación y para que el maquillaje se adhiera bien, lo mejor es limpiar tu rostro para eliminar este sebo y que tu piel parezca realmente renovada.
¿Qué producto debo utilizar para desmaquillarme?
En la actualidad existe una amplia gama de productos desmaquillantes: agua micelar o limpiadora, espuma, geles, leches, aceites, productos sin aclarado... Existe todo (o casi). Lo más importante es elegir un producto adaptado a tu tipo de piel, a tus necesidades y a tus gustos para que la etapa de desmaquillado siga siendo un momento de placer, sin riesgo de alterar la integridad de la piel.
Para optimizar la limpieza de tu piel, puedes incorporar la acción exfoliante de un gel exfoliante suave una o dos veces a la semana para reforzar tu rutina y suavizar la textura de la piel.
Desmaquillar correctamente los ojos
Como los ojos y su contorno son una zona ultrasensible del rostro, es esencial desmaquillarse con un producto adecuado para no dejar que los pigmentos nocivos del maquillaje debiliten la finísima piel y favorezcan la aparición de arrugas, y más aún si tienes la piel o el contorno de ojos sensibles.
Descubre nuestros consejos para desmaquillarte en cualquier situación: sin desmaquillante ni discos de algodón, siempre hay una alternativa con los productos que tienes en casa.
NUESTRAS SOLUCIONES PARA LA LIMPIEZA Y EL DESMAQUILLADO
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No es lo mismo. La limpieza incluye el desmaquillado, no al contrario. Una piel desmaquillada no es una piel limpia; será necesario «terminar el trabajo» eliminando los restos de maquillaje y las impurezas que puedan quedar. Hay varias opciones para ello: gel limpiador, espuma limpiadora, agua termal... ¡A cada uno lo suyo!
Todo depende de tu piel. Si tienes la piel sensible, evita aclararte con agua dura. Pero algunos profesionales aconsejan no dejar el agua micelar sobre la piel, especialmente si es grasa. En este caso, lo mejor es utilizar agua termal en un pañuelo de tela para eliminar el exceso.
¡No! Siento decepcionarte, pero todo el mundo necesita limpiarse la piel, incluso quienes no se maquillan. Si dejas que las partículas de contaminación o el exceso de sebo se depositen en tu piel durante la noche, corres el riesgo de que se obstruyan los poros y aparezcan imperfecciones. ¡Es la mejor manera de acelerar el envejecimiento y tener un cutis apagado!
