¿Cómo cuidar la piel seca sin dañarla más? Si sufres de piel seca, seguro que te has hecho esta pregunta. Nutriendo tu piel, por supuesto. Pero no solo eso. El cuidado de la piel seca implica una serie de hábitos cosméticos. Desmaquillado, limpieza, hidratación y cuidado diario... Lo explicamos todo.
La piel seca está tirante, se descama y te molesta. A veces pica. La primera medida es evitar agravar la situación y dañar la película hidrolipídica al lavarte. Para ello, hay que adoptar los hábitos adecuados:
Evita jabones o geles de ducha agresivos. Elige barras o geles supergrasos, enriquecidos con ingredientes protectores e hidratantes;
el agua demasiado caliente es perjudicial. Recomendamos una temperatura entre 32 y 34 °C;
Date duchas cortas. El agua suele ser dura e irrita la piel;
¿Conoces los productos emolientes? Se trata de productos para el cuidado de la piel que le aportan propiedades hidratantes naturales. Devuelven la flexibilidad a la piel.
Si tu piel es moderadamente (o gravemente) seca, aplica tu emoliente después de la ducha. Es lo mejor porque se extiende más fácilmente sobre la piel ligeramente húmeda. Caliéntala en las manos y aplícala por todo el cuerpo. Presiona suavemente con toda la superficie de la mano.
Evita frotar para no irritar la piel. Quedará rápidamente más suave, hidratada y protegida. También se restablecerá la función de barrera.
Un breve consejo: si tu piel es muy seca, utiliza Cold Cream (especialmente nutritivo, protector y suavizante) como tratamiento durante unos días, preferiblemente por la noche.
Como mi piel cambia según la estación del año, en verano prefiero las cremas hidratantes ligeras y en invierno las más ricas.
CONSEJOS FÁCILES Y EXPERTOS
Cuidado de la piel: centrarse en las vitaminas
La elección de los nutrientes adecuados también es importante para una piel sana. Céntrate en productos para el cuidado de la piel y alimentos ricos en:
Vitamina C. Ayuda especialmente a luchar contra los radicales libres (causantes del estrés oxidativo). También desempeña un papel esencial en la síntesis del colágeno. Con un buen aporte de ácido ascórbico (su nombre científico), tu cutis estará más radiante. En el ámbito del cuidado de la piel, los encontrarás en sérums que potenciarán el efecto de tu crema de día. A la hora de comer, prueba con los kiwis o las grosellas;
Vitamina E.Es antioxidante y protege la piel diariamente. De nuevo, lo mejor son los sérums. En la cocina, puedes encontrarla en aceites vegetales o almendras.
No olvides desmaquillarte
El desmaquillado es un paso esencial en la rutina de cuidado de la piel. Lo más importante es hacerlo todos los días para tener una piel bonita y radiante.
Utiliza una leche limpiadora
Olvídate del algodón, que suele ser demasiado áspero y agresivo. Aplica la leche limpiadora con las yemas de los dedos en movimientos circulares. Esto ayudará a eliminar las impurezas que se han acumulado durante el día. A continuación, retira el exceso con una toallita reutilizable o un disco de algodón.
Para mayor suavidad
Para perfeccionar el desmaquillado y aportar un poco más de suavidad a tu piel, humedece el disco de algodón reutilizable con Agua termal de Avène. Este simple gesto es suficiente para reforzar el efecto refrescante de la leche limpiadora.
¿Cómo se nutre la piel seca?
Limpiar la piel. Protégela. El último paso es nutrirla. Para ello, elige un producto de cuidado nutritivo que se aplica por la mañana y por la noche después de rociar el agua termal. Los efectos de la noche se sumarán a los del día.
Un consejo rápido: en invierno, cuando la piel está más seca, opta por texturas ricas. En verano, opta por texturas ligeras.
