- CONTENIDO
- Eccema - eccema atópico - psoriasis
Eccema en el rostro y el cuello
- Vivir con eccema o psoriasis
- Psoriasis y eccema en niños: higiene adecuada
- Psoriasis y eccema en adultos: higiene adecuada
- La psoriasis y el eccema en personas adultas - reglas de hidratación
- Niños - Cuidados y consejos contra el picor
- Psoriasis y eccema infantil - reglas de hidratación
- Vivir con eccema o psoriasis: Niños
- Vivir con eccema o psoriasis: adultos
- Adultos - Cuidados y consejos contra el picor
Eccema en el rostro y el cuello
El eccema puede aparecer en todas las partes del cuerpo. El rostro (mejillas, frente, labios u orejas) y el cuello no se libran de las lesiones rojas y el picor. Afortunadamente, existen soluciones para aliviar las molestias durante los brotes y proteger la piel fina y frágil del rostro.
Causas del eccema en el rostro y el cuello
En el rostro y el cuello, el eccema puede ser atópico o de contacto. En el caso del rostro, afecta más a los bebés y a los adultos. El eccema en el cuello es común en los niños.
Cuando se trata de un alérgeno, puede estar en una barra de labios o en bisutería que contenga níquel. El alérgeno también puede haberse transmitido al rostro a través de las manos, como por ejemplo mediante el esmalte de uñas, o a través del aire, que esparce por ejemplo el polen. El cuello es, por tanto, una zona muy expuesta porque a menudo lo tocamos sin darnos cuenta. Y en invierno, está en contacto con muchos objetos, como las etiquetas de los jerséis de cuello alto o las bufandas de lana, que pueden irritar la piel.
Cuando las lesiones de eccema llegan al rostro, la enfermedad es visible y las miradas de los demás pueden ser difíciles de soportar.
El eccema también puede afectar a las orejas
Enrojecimiento en el lóbulo de la oreja, costras en los pliegues, dolor o incluso una sensación extraña. El eccema aparece a veces en las orejas. Cuando aparece una grieta en el pliegue bajo el lóbulo de la oreja, lo más probable es que se trate de una forma atópica. Pero el eccema de contacto también es frecuente en esta zona. Se recomienda buscar las siguientes causas: pendientes de bisutería, teléfonos móviles, auriculares, champú, tinte para el pelo o incluso gotas para los oídos.
Aliviar los síntomas del eccema en el rostro y el cuello
Estas son las reglas básicas para aliviar los brotes de eccema y calmar la piel del rostro a largo plazo.
Evitar los brotes en el rostro y el cuello
Mientras que el tratamiento de un brote de eccema en el rostro y el cuello suele ser un tratamiento localizado a base de cortisona o una pomada inmunosupresora tópica, la piel necesita repararse cuando no hay brotes. Para que sea menos reactiva y para espaciar estos brotes, se recomienda aplicar un emoliente todos los días.
Calma la piel del rostro y el cuello del bebé
En los bebés, el eccema aparece en el cuero cabelludo, las mejillas y los pliegues del cuello. Las manchas rojas y costras también son causadas a veces por la salivación. Para reducir los brotes, se recomienda aplicar un emoliente adecuado varias veces al día. Para tratar el brote, se puede recetar un dermocorticoide.
CONSEJOS ESPECIALIZADOS
¿Cómo se trata el eccema bucal?
Cuando aparecen costras y supuración alrededor de la boca y en los labios, se trata de un brote de eccema. Tanto si se trata de un eccema atópico como de contacto, la aplicación de un corticoide localizado proporciona un rápido alivio del prurito asociado, es decir, del picor. Pero este tratamiento no es suficiente. Es esencial aplicar un producto de cuidado emoliente con diligencia, incluso cuando no hay brotes. La piel estará mejor hidratada y protegida, y se podrán espaciar estos brotes. También se debe evitar tocarse y lamerse los labios para evitar estimular la irritación. Otro consejo: si eres músico, tu instrumento (una trompeta o un clarinete, por ejemplo) puede ser la causa de tu dermatitis.
Utilizar maquillaje respetuoso con la piel
Antes de utilizar una nueva base de maquillaje, pruébala en una pequeña zona de la piel. Esto evitará un brote de eccema. Utilizar maquillaje médico sin perfume o un limpiador. Retirar el exceso con un pañuelo de papel desechable. A continuación, rociar con el Agua termal de Avène y masajear la piel para eliminar las impurezas restantes. Por último, secar suavemente dando toques con una toalla suave. Reemplazar los productos cada 3 meses.
El frío ayuda a calmar el picor y el enrojecimiento de la piel. Así que no dudes en poner la crema hidratante en la nevera durante todo el día para calmar la piel por la noche, si es necesario.
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